La decisión de un juez federal en contra de la legalidad del programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia ,supone un balde de agua fría para miles de jóvenes inmigrantes ,Aunque dicho fallo no afecta a los dreamers, los jóvenes llegados ilegalmente al país cuando eran niños de la mano de sus padres, que ya están amparados por el programa. El juez federal de distrito Andrew Hanen aclaró que la orden no obliga al Gobierno a tomar “ninguna medida de inmigración, deportación o penal en contra de ningún beneficiario de DACA”, un programa del que dependen más de 650,000 jóvenes en Estados Unidos.