En una conferencia de prensa realizada el miércoles, el gobernador Ron DeSantis firmó un proyecto de ley de inmigración enviado por la legislatura de Florida, mientras denunciaba lo que llamó la “crisis fronteriza de Biden”. El evento tuvo lugar en Miller Electric Company, en el área de Southpoint de Jacksonville.
DeSantis criticó la falta de acción del presidente Biden con respecto a la situación en la frontera y afirmó que este no ha visitado la frontera en todo el tiempo que ha estado en el cargo, a diferencia de su propia visita en enero a El Paso, en la frontera Sur.
El proyecto de ley, conocido como SB-1718 y con un extenso contenido de 43 páginas, incluye disposiciones para invalidar licencias de conducir y tarjetas de identificación emitidas por otros estados a “inmigrantes no autorizados”. Además, establece requisitos para que los hospitales recojan información sobre el estado migratorio de los pacientes y la envíen al estado.
El gobernador destacó que ya es ilegal que los empleadores contraten a personas indocumentadas, pero afirmó que los nuevos requisitos del proyecto de ley, en particular el sistema E-Verify, ayudarán a reforzar la aplicación de estas leyes.
El proyecto de ley también crea un “Consejo de Supervisión de Seguridad Nacional”, compuesto por diversos funcionarios estatales y fuerzas del orden. Esto tiene como objetivo brindar dirección y liderazgo en los esfuerzos relacionados con la prevención, preparación, protección, respuesta y recuperación de incidentes de terrorismo, así como en la aplicación de la ley de inmigración.
Otro aspecto del proyecto de ley, el HB-1718, elimina la posibilidad de que las personas conocidas como “Dreamers”, que llegaron al país ilegalmente cuando eran niños, ejerzan la abogacía en el estado de Florida, al eliminar el lenguaje que lo permitía de los Estatutos del Estado.