El gobernador Greg Abbott ha firmado la ley SB4 en Texas, una legislación que criminaliza la inmigración indocumentada a nivel estatal. La SB4, que establece penas para aquellos que crucen ilegalmente la frontera de Texas y otorga autoridad al estado para emitir órdenes de regreso a otros países, ha generado controversia y críticas por considerarse ‘antiinmigrante’.
Entre los aspectos más destacados de la ley se encuentra la posibilidad de que jueces texanos emitan órdenes de expulsión en lugar de proceder con el enjuiciamiento de un indocumentado. En casos de delitos graves, las penas podrían variar de 2 a 20 años de prisión, además de multas. La ley crea un nuevo delito estatal, la entrada ilegal desde una nación extranjera, con posibles sanciones de hasta seis meses de cárcel o una multa de $2000.
La entrada en vigor de la ley está programada para la primavera de 2024, aunque algunos grupos de derechos civiles han anunciado la intención de presentar demandas, anticipando que el caso podría llegar a la Corte Suprema de Estados Unidos.
Las críticas a la SB4 argumentan que podría dar lugar a la discriminación contra texanos hispanos y latinos, así como contra residentes de color. La ley se suma a otras iniciativas de seguridad en la frontera lideradas por Abbott, quien también firmó la SB3, destinando $1.54 mil millones para la continuación de la construcción del muro fronterizo.
Aunque algunos líderes republicanos elogian la SB4 como la medida de seguridad fronteriza más fuerte, hay desacuerdo incluso dentro del partido. La ley podría enfrentar desafíos legales significativos, sumándose a otros casos en los que Texas defiende sus políticas de seguridad en la frontera en instancias judiciales.